domingo, 4 de febrero de 2024

 

Maria Luisa Spaziani

 

La confluencia

 





 


La confluencia

 

La uña que raspaba contra el vidrio

perro o persona amada, mi padre o el jardinero

ya no llama ni espera ni se obstina.

Existe, sin embargo, más inquieta que el mar.

 

Es un ruido aplastado, una pastilla de silencio

que lleva aún un nombre, un vislumbre de vida.

Sucede que encontremos en un libro

una flor memorable, filigrana y fantasma.

 

Todo lo que ahora es denso, confluencia de linfas,

ha de pasar por ese ojo de aguja.

Ríe y llora el presente, y se prepara para el rito.

Las máscaras bifrontes lo contemplan pasar.

 

Maria Luisa Spaziani

 

[Versión de P. A.

Córdoba, 04-II-24]

 

*

 

Il crocevia

 

Quell'unghia che raspava contro i vetri

cane o persona amata, mio padre o il giardiniere

più non chiama né indugia né si ostina.

Ma esiste, più irrequieta d'ogni mare.

 

È un rumore schiacciato, una pastiglia di silenzio

che porta ancora un nome, un barlume di vita.

Càpita a volte di trovare in un libro

un fiore memorabile, filigrana e fantasma.

 

Tutto ciò che ora è denso, un crocevia di linfe,

dovrà passare per quella cruna d'ago.

Ride e piange il presente, e si prepara al rito.

Le maschere bifronti lo guardano passare.


Maria Luisa Spaziani

 

[De Geometria del disordine,

Mondadori, Milano, 1981]



 

Maria Luisa Spaziani

 

Utilidad de la memoria

 



 

 

Utilidad de la memoria

 

Otros acopiarán lo que yo pierdo

día tras día, lentísimamente.

Tendrán sentidos frescos, morderán

estremecidos en la pulpa amarga,

sobrecogidos de delicia al alba

si los roza al azar un dedo de aire de oro.

 

Pero, gracias al Cielo, yo lo recuerdo todo,

tengo joven y fuerte la memoria.

 

¿Acaso Robinson Crusoe sudando

por sacar una chispa de dos leños

no recuerda muy bien esa alacena

que indiscutiblemente es suya en Londres,

donde un tesoro rico en mil guineas

in saeculorum saecula lo espera?

 

Maria Luisa Spaziani

 

[Versión de P. A.

Córdoba, 03-II-24]

 

*

 

Utilità della memoria

 

Altri guadagneranno ciò ch’io perdo

giorno su giorno, lentissimamente.

Avranno i sensi freschi, morderanno

rabbrividendo nella polpa acerba,

trasaliranno di delizia all’alba

se mai li sfiori un dito d’aria d’oro.

 

Ma io ricordo tutto, grazie al Cielo,

la memoria l’ho giovane e forte.

 

Forse che Robinson Crusoe sudando

per trarre una scintilla da due legni

non ricorda benissimo lo stipo

che incontestato a Londra gli appartiene,

dove un tesoro di mille ghinee

sta in saeculorum saecula aspettando?

 

Maria Luisa Spaziani

 

[De Utilità della memoria,

Mondadori, Milano, 1966]


viernes, 26 de enero de 2024


Rocco Scotellaro

 

Casa

(Dos versiones)

 



 

 

Casa

 

Madre mía, no sé cómo has podido

sufrir años cenizas del hogar;

ya a la ventana no te asomas más,

 

nunca, y pierdes las hojas, el marido

y los hijos lejanos; la fe en dios

también se te ha caído de las manos.

 

La casa es tuya ahora que te vas.

 

Rocco Scotellaro


[Versión de P. A.

Córdoba, 25-I-24)

 

*

 

Casa

 

Cómo has podido, madre, soportar

por años las cenizas del hogar,

a la ventana no te asomas más.

 

Pierdes las hojas, el marido, y los hijos lejanos,

y también la fe en dios se te ha caído de las manos;

la casa es tuya ahora que te vas.

 

Rocco Scotellaro

 

[Versión de P. A.

Córdoba, 26-I-24]

 

*

 

Casa

 

Come hai potuto, mia madre, durare

gli anni alla cenere del focolare,

alla finestra non ti affacci più, mai.

 

E perdi le foglie, il marito, e i figli lontani,

e la fede in dio t'è caduta dalle mani,

la casa è tua ora che te ne vai.

 

Rocco Scotellaro

 

[De È fatto giorno, Mondadori, Milán, 1954,

edición póstuma, prefacio de Carlo Levi]



jueves, 25 de enero de 2024

 

Rocco Scotellaro

 

Se ha hecho de día

 



 

 

Pirámides de estrellas en tres cuatro puntos del cielo

sobre un gran cuadro de olivos o una vid o una retama:

tierra desconsolada finalmente callas.

Ahora que se rompen los tiempos habrás dado lo que 

                                                                        [puedes.

Nosotros te tenemos en nuestro pensamiento porque 

                                                      [septiembre vuelve,

siempre podemos esperar los frutos de una nueva estación.

 

Se ha hecho de día, entramos también nosotros en el juego

con las ropas y los zapatos y las caras que teníamos.

Las liebres se han retirado y los gallos cantan,

regresa la cara de mi madre al lado del hogar.

 

Pero no tengo una bella durmiente a la que despertar

ni yo, ni mis compañeros, que toda la noche

hemos estado bajo las frustas del amor

y ninguno tenía que ceder, nunca, adelante.

 

El amor no llega con el día.

 

Rocco Scotellaro

(Tricarico, 1923 - Portici, 1953)

 

[Versión de P. A.

Córdoba, 24-I-24]

 

*

 

Le piramidi di stelle in tre quattro punti del cielo

sopra un quadrone di ulivi o una vite o una ginestra:

terra senza consolazione finalmente stai zitta.

Ora che si rompono i tempi avrai dato ciò che puoi.

Noi ti teniamo a mente perché settembre

ricomincia,

possiamo sempre sperare i frutti di un’altra

stagione.

 

E’ fatto giorno, siamo entrati in giuoco anche noi

con i panni e le scarpe e le facce che avevamo.

Le lepri si sono ritirate e i galli cantano,

ritorna la faccia di madre al focolare.

 

Ma non ho una bella dormiente da svegliare

né io, né i miei compagni che tutta la notte

ci hanno tenuti sotto le fruste dell’amore

e nessuno doveva cedere, guai, avanti.

 

L’amore non viene col giorno.

 

Rocco Scotellaro

 

[De È fatto giorno,

Mondadori, Milán, 1982,

Edición de Carlo Vitelli]

 

Poema inconcluso, incluido en las notas de la edición de Vitelli de È fatto giorno (1982). Carlo Levi, en la edición de 1954, utilizó la segunda estrofa sola como apertura de la entera colección. [Nota en la antología Poeti italiani del secondo Novecento (1945-1995), Mondadori, I Meridiani, Milano, 1996, edición de Maurizio Cucchi y Stefano Giovanardi, p. 247]


martes, 23 de enero de 2024

 

Rocco Scotellaro

 

No iremos a bañarnos en las playas

 



 

 

No iremos a bañarnos en las playas

 

No iremos a bañarnos en las playas

nosotros, sino a cosechar

y el sol nos cocerá como se cuece

la corteza del pan.

Tenemos el cuello duro, la cara

la tenemos de tierra, y a los brazos

de leña seca color del ladrillo.

Llevamos los mendrugos en las mangas

de las camperas a la bandolera.

Dormimos en las eras

tomados del cabestro de los mulos.

Nuestra carne no siente

el cosquillear de los mosquitos

que nos chupan la sangre.

Cada cual tiene los huesos torcidos

no sueña con subirse a las mujeres

que duermen frescas en vestidos breves.

 

Rocco Scotellaro

 

[Versión de P. A.

Alta Gracia, 22-I-24]

 

*

 

Noi non ci bagneremo

 

Noi non ci bagneremo sulle spiagge

a mietere andremo noi

e il sole ci cuocerà come la crosta del pane.

Abbiamo il collo duro, la faccia

di terra abbiamo e le braccia

di legna secca colore di mattoni.

Abbiamo i tozzi da mangiare

insaccati nelle maniche

delle giubbe ad armacollo.

Dormiamo sulle aie

attaccati alle cavezze dei muli.

Non sente la nostra carne

il moscerino che solletica

e succhia il nostro sangue.

Ognuno ha le ossa torte

non sogna di salire sulle donne

che dormono fresche nelle vesti corte.

 

Rocco Scotellaro

(Tricarico, 1923 - Portici, 1953)

 

[De Margherite e rosolacci,

Mondadori, Milano, 1978]


 

Rocco Scotellaro

 

A la hija del carretero

 



 

 

A la hija del carretero

 

A la hija del carretero

Yo ya no sé vivir aquí a tu lado

alguien me ata la voz dentro del pecho

sos la hija del carretero

la que me quita el aire ahora en la boca.

Porque debajo nuestro en el establo

los mulos se mueven en el sueño

porque tu padre bufa cerca nuestro

y aún no va en lo alto de su carro

a espantar las estrellas con el látigo.

 

Rocco Scotellaro

 

[Versión de P. A.

Alta Gracia, 21-I-24]

 

*

 

Alla figlia del trainante

 

Io non so più viverti accanto

qualcuno mi lega la voce nel petto

sei la figlia del trainante

che mi toglie il respiro sulla bocca.

Perché qui sotto di noi nella stalla

i muli si muovono nel sonno

perché tuo padre sbuffa a noi vicino

e non ancora va alto sul carro

a scacciare le stelle con la frusta.

 

Rocco Scotellaro

(Basilicata, 1923-1953)

 

[De È fatto giorno, Mondadori, Milán, 1954,

edición póstuma, prefacio de Carlo Levi]


jueves, 2 de noviembre de 2023

 Al Dubin


El bulevar de los sueños rotos

 

 




 

El bulevar de los sueños rotos

 

Camino por la calle del dolor,

El bulevar de los sueños perdidos,

En donde gigoleta y gigoló

Reciben besos sin remordimientos

Y así olvidan que están rotos sus sueños.

 

Reís de noche y sollozás al alba

Cuando mirás tus sueños en pedazos

Y gigoleta y gigoló descubren

Al despertar sus ojos empapados

Con lágrimas de sueños destrozados.

 

Es aquí donde siempre me hallarás,

Yendo arriba y abajo el bulevar,

Pero a mi alma la he dejado lejos,

En una vieja iglesia de mi pueblo.

 

La alegría que aquí vas a encontrar

Es prestada, verás, no durará,

Pero igual gigoleta y gigoló

Cantan y cantan siempre su canción

Y siempre bailan por el bulevar

De los sueños que están rotos, perdidos.


1933

 

Al Dubin

 

[Versión de P. A.

Córdoba, 02-XI-23]

 

*


The boulevard of broken dreams


I walk along the street of sorrow,

The boulevard of broken dreams,

Where gigolo and gigolette

Can take a kiss without regret

So they forget their broken dreams.

 

You laugh tonight and cry tomorrow

When you behold your shattered dreams

And gigolo and gigolette

Awake to find their eyes are wet

With tears that tell of broken dreams.

 

Here is where you'll always find me,

Always walking up and down,

But I left my soul behind me

In an old cathedral town

 

The joy that you find here you borrow,

You cannot keep it long it seems,

But gigolo and gigolette

Still sing a song and dance along

Boulevard of broken dreams.

 

Al Dubin