sábado, 28 de abril de 2018



Robert Frost

Tiempo para hablar





Tiempo para hablar

Cuando desde el camino un amigo me llama
Y lleva a su caballo, como buscando, al paso,
No me quedo parado ni miro alrededor
Cuánto no he desbrozado aún de las colinas,
Ni desde donde estoy le pregunto: “¿Qué pasa?”
No, y no porque hay también un tiempo para hablar.
Hundo entonces mi azada en la tierra movida,
Con la punta hacia arriba y cinco pies de altura,
Y lentamente voy hasta el muro de piedra
Para nuestra amistosa reunión.

Robert Frost

[Versión de P. A.
Córdoba, 15-IV-12]

*

Time to talk

When a friend calls to me from the road 
And slows his horse to a meaning walk, 
I don't stand still and look around 
On all the hills I haven't hoed, 
And shout from where I am, What is it? 
No, not as there is a time to talk. 
I thrust my hoe in the mellow ground, 
Blade-end up and five feet tall, 
And plod: I go up to the stone wall 
For a friendly visit. 

Robert Frost


miércoles, 18 de abril de 2018


Vittorio Bodini  

He madurado tarde…





He madurado tarde…

He madurado tarde. Es la ansiedad
de vivir demasiado rápidamente 
lo que me ha traicionado.
No darle tiempo al tiempo. Ver
la belleza sufriendo
por no poder usarla.
He aprendido tarde a armonizar
con el murmullo de un arroyo pulsos del corazón,
a dar cabida a la naturaleza
entre mis pensamientos
como a un huésped a quien dejar que esté a su aire.

Vittorio Bodini  

[Versión de P. A.
Córdoba, 18-IV-18]

*

Sono maturato tardi…

Sono maturato tardi. È la smania
di vivere troppo presto che m’ha tradito.
Non dar tempo al tempo. Vedere
la bellezza soffrendo
di non poterla usare.
Ho imparato tardi a accordare
al mormorio d’un ruscello i moti del cuore,
a ammettere la natura fra i miei pensieri
come un ospite da lasciare a suo agio.

Vittorio Bodini  

[De "Serie stazzemese" (1961),
en Tutte le poesie (1932-1970),
edición al cuidado de Oreste Macrì,
Mondadori, Milán, 1983]

viernes, 13 de abril de 2018



Vittorio Bodini

Las manos del Sur





Las manos del Sur

a Rafael Alberti


Has hecho bien dice en no hablarme del Sur del Sur
y de sus áridas cabras saltarinas de roca en roca

Oh las pálidas manos de las cabras del Sur

Has hecho bien dice en no hablarme del Sur del Sur
y de sus cabras a medias devoradas por el Estado

Oh las pezuñas cándidas de las cabras del Sur

Has hecho bien dice en no hablarme del Sur del Sur
y de sus horizontes en un tiempo abiertos 
de cada lado

Oh las pálidas uñas con las que cada uno se destroza 
            en el Sur

Has hecho bien dice en no hablarme del Sur del Sur
y de sus peones asesinados por la policía

Oh las pálidas manos un poco regordetas de los Tribunales
del Sur los olivos del corazón humano el acusar
y el acusarse sin piedad El gran Sur
de las cuestiones de principio

Has hecho bien en no hablarme del Sur

15 de enero de 1969

Vittorio Bodini

[Versión de P. A.
Córdoba, 13-IV-18]

*

Le mani del Sud

a Rafael Alberti


Hai fatto bene dice a non parlarmi del Sud del Sud e delle
sue brulle capre saltellanti di scoglio in scoglio

O le pallide mani delle capre del Sud

Hai fatto bene dice a non parlarmi del Sud del Sud
e delle sue capre per metà divorate dallo Stato

O le candide unghie delle capre del Sud

Hai fatto bene dice a non parlarmi del Sud del Sud
e dei suoi orizzonti un tempo aperti da ogni lato

O le pallide unghie con cui ciascuno si dilania nel Sud

Hai fatto bene dice a non parlarmi del Sud del Sud
e dei suoi braccianti uccisi dalla polizia

O le pallide mani un po' grassocce dei Tribunali del Sud
gli olivi dal cuore umano l'accusare e accusarsi 
senza pietà Il grande Sud delle questioni 
di principio

Hai fatto bene a non parlarmi del Sud

15 gennaio 1969


Vittorio Bodini

[De "La civiltà industriale o Poesie ovali" (1966-1970),
en Tutte le poesie (1932-1970),
edición al cuidado de Oreste Macrì,
Mondadori, Milán, 1983]


miércoles, 11 de abril de 2018



Vittorio Bodini

Poesía triste a la poesía





Poesía triste a la poesía

Poesía, indagación desgarradora
sobre la verdad del ser,
elegimos tu atajo.
No nos llevó muy lejos,
de verdad, no.
Sí, algunas veces, la ebriedad
de estar cerca de algo
pero en qué raros momentos
y a qué precio
de fastidio y rupturas
de las más delicadas tramas de afectos.
Odio hasta el tenue verde del verano
que asedia estas ventanas.
Venga la mano de quien sé y libere
de angustia el despertar en mis mañanas.

Julio 1967

Vittorio Bodini

[Versión de P. A.
Córdoba, 11-IV-18]

*

Poesia triste alla poesia

Poesia, struggenti inchieste
sulla verità dell’essere,
scegliemmo la tua scorciatoia.
Non ci ha portati lontano,
no davvero.
Sì, qualche volta l’ebbrezza
d’esser vicini a qualcosa
ma in che rari momenti
e a che prezzo
d’insofferenze, di rotture
d’ogni più delicata trama d’affetti!
Odio financo il delicato verde dell’estate
che attornia le mie finestre.
Venga la mano di chi so e liberi
dall’angoscia i miei risvegli.

Luglio 1967

Vittorio Bodini

[De "Zeta" (1962-1969),
en Tutte le poesie (1932-1970),
edición al cuidado de Oreste Macrì,
Mondadori, Milán, 1983]


miércoles, 4 de abril de 2018



Vittorio Sereni

La playa




La playa

Todos se fueron ―
parloteaba la voz en el teléfono.
Y luego, sabihonda: ― Ya no regresarán ―.

Pero hoy,
en un trecho de playa nunca antes visitado,
esos parches solares... ¿Las señales
de aquellos que en verdad nunca partieron?
Y al darte vuelta, mudos, como si nada fuera.

Los muertos no son eso que de día
en día perdemos, sino aquellos
parches de inexistencia, cal o ceniza
lista para volverse movimiento, luz.
                                                           No
dudes ― me infunde el mar su fuerza ―,
hablarán.

Vittorio Sereni

[Versión de P. A.
Córdoba, 04-IV-18]


*

La spiaggia

Sono andati via tutti ―
blaterava la voce dentro il ricevitore.
E poi, saputa: ― Non torneranno più ―.

Ma oggi
su questo tratto di spiaggia mai prima visitato
quelle toppe solari… Segnali
di loro che partiti non erano affatto?
E zitti quelli al tuo voltarti, come niente fosse.

I morti non è quel che di giorno
in giorno va sprecato, ma quelle
toppe d’inesistenza, calce o cenere
pronte a farsi movimento e luce.

Non
dubitare ― m’investe della sua forza il mare ―
parleranno.

Vittorio Sereni

[De Gli strumenti umani (1965),
en Tutte le poesie, Mondadori, 1987]